Mi héroe cacareó en
los frenéticos galpones de Silicon
Valley
Pio, pio, pio a la carretera de veintiún pulgadas
Trasatlánticos llevan
mis vísceras a los supermercados
La vida retratada en
sangres cibernéticas, y el semen de silicio, y los óvulos en los
laboratorios Bayer
La catalepsia: On – Off
Nos damos las manos
con guantes fosforescentes, nos
quitamos los rostros para
exhibirlos: la raza del símbolo,
y las lágrimas del ácido sulfúrico
Plañideras del 00101000010101110111
Nos declaramos bipolares
engendros de la emoción, yonkis con los ojos cercenados…
Hoy Soy Jorge Zalamea y bajo las escalinatas marcianas, declaro a Gonzalo Arango
Como el aguacil de las ensenadas de los Beat, un policía
infiltrado en el vello púbico de Angelita…
Mi héroe folló con el
holograma de la generación solitaria, su esqueleto lleno de chips
amaba cuando la lucecita verde se encendía, como la mejor zarigüeya virtual
bajo las tuberías de
oro en las cloacas del infierno
Y no llueve en el Catatumbo, y no llueve en el Putumayo, y no llueve en la Comuna 13
Lluvia de coltán
Lluvia de coltán:
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Mi héroe tenía la
indignación de 300 mil clics diarios, mi héroe
tenía la revolución de las secreciones metafísicas de la nariz, mi héroe
no soportaba el silencio de un chat
Incomunicación----------------INCOMUNICACIÓN
Un mundo de Prozac
Un mundo de Prozac
Un mundo de Prozac
Mi neurona ha pasado el mistral, cargas eléctricas de un
tarot malicioso
No soy rosacruz, mormón,
ni el suicidio fingido de Crowley
Estoy abatido, la melancolía tiene el software de los simios
Neocórtex de los evolucionados: hoy bailo, hoy grito, hoy
canto…
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